Pemex pierde 10,000 empleos por caída del crudo

Recibí un documento muy completo de unos amigos bien colocados en la industria, el cual muestra con gran precisión los datos sobre cómo las empresas han recortado puestos de trabajo, y cuántos. La conclusión: la industria del petróleo y el gas en todo el mundo, incluidas las empresas de servicios petroleros, los fabricantes de piezas y los fabricantes de tubos de acero, ha despedido a 74,000 hasta el momento.

Teniendo en cuenta que hay cerca de 600,000 trabajos en el sector de petróleo y gas de Estados Unidos, se trata de un impacto considerable. Es importante señalar que la mayoría de éstos son empleos de clase media. No hay muchos sectores en los que alguien con poco más que la preparatoria pueda ganar 100,000 dólares al año, pero ése es un paquete de compensación común para los trabajadores de una plataforma de perforación. Gente que opera una gran cantidad de equipos de perforación me ha dicho que por cada plataforma que suspende su actividad alrededor de 40 personas pierden su empleo. El número de equipos de Estados Unidos se ha reducido en más de 700 de estas fechas el año pasado.

De hecho, el trabajador del petróleo y el gas promedio en Estados Unidos gana 108,000 dólares anuales, según cifras del gobierno. El enorme crecimiento de estos puestos de trabajo de petróleo y gas ha sido vital para ayudar a Estados Unidos a salir de la Gran Recesión.

En el caso de México, el documento indica que Petróleos Mexicanos ha despedido a 10,000 trabajadores, un número considerable tomando en cuenta que la plantilla de la paraestatal ronda los 150,000 empleados. En febrero, Pemex informó que recortaría 10,000 millones de pesos (mdp) de gasto en servicios profesionales, aunque no detalló el número de trabajadores que serían despedidos.

En cuanto a la remuneración de los trabajadores petroleros, la última cifra publicada por Pemex sobre los ingresos promedio de sus trabajadores data de 2010 y era de 37,000 pesos mensuales.

En todos los casos, además, es necesario tener en cuenta el efecto adicional de cada despido, pues significa que mucho menos dinero será gastado en comida, ropa, autos, casas, y así sucesivamente.

Las empresas de servicios han llevado la peor parte, con cerca de 59,000 despidos, incluyendo 9,000 de Schlumberger y 8,000 en Weatherford, casi 7,000 de Baker Hughes y 6,600 en Halliburton.

Luego están las empresas de exploración y producción, con más de 10,000 despidos. Esto incluye 2,000 en Total, 1,500 en Sasol y 1,000 en Suncor.

Las empresas de manufactura han recortado a cerca de 5,000, con 3,800 despidos en US Steel. Las compañías de tuberías han despedido a casi 2,800, con la mayoría de los cortes procedentes de Tenaris con 1,440, MRC Global con 700 y Vallourec Stars con 300.

Aunque detallada, dudo que la lista publicada al final de este post sea exhaustiva. Si sabes de otros recortes que no estén en ella (o discrepas con los números), por favor deja un comentario en el espacio reservado para tal fin.

La mayor parte de estos recortes se ha concentrado en Estados Unidos, y si Washington quiere ayudar a detener esos despidos antes de que la situación empeore, sólo hay una cosa que puede hacer: votar para que se derogue la anticuada prohibición de las exportaciones petroleras puesta en marcha por el presidente Nixon en la década de 1970.

Los perforadores de Estados Unidos actualmente están extrayendo más crudo ligero y dulce de las formaciones de esquisto del que las refinerías pueden manejar. No es que haya demasiado; después de todo, Estados Unidos sigue importando cerca de 5 millones de barriles por día del resto del mundo, pero esas importaciones son casi en su totalidad crudo más pesado y más agrio, del tipo que las refinerías estadounidenses fueron construidas para procesar antes del boom de shale.

Si las compañías petroleras estadounidenses pudieran exportar su crudo ligero podrían cobrar más por él que lo que los refinadores estadounidenses están dispuestos a pagar (y por lo tanto reducir el diferencial de precios WTI-Brent). Eso ayudaría mucho a mejorar la economía del petróleo estadounidense, y ayudar a mantener estos puestos de trabajo bien remunerados en Estados Unidos. Y debido a que el crudo estadounidense ligero competiría directamente con el petróleo de la OPEP, sus exportaciones ayudarían también a bajar el precio mundial del crudo.

¿Y si todo lo demás falla? Algunos de estos trabajadores despedidos podrían encontrar un nuevo futuro en Arabia Saudita, donde se reporta que Aramco busca trabajadores con experiencia en extracción de petróleo gas shale para “unirse” a su equipo.

Fuente: www.forbes.com.mx / Por Christopher Helman