Formar un buen equipo es indispensable para el éxito de cualquier compañía, tan primordial como la confianza que se necesita para liderarlo. Y aunque un equipo tiene un líder, esto no quiere decir que él es quien tiene la última palabra. “Tampoco significa que todas las decisiones van de arriba hacia abajo, sino, al contrario, pueden surgir de abajo hacia arriba”, dice Robert Shimonski, escritor y emprendedor exitoso.