Durante el sexto Foro de Autorregulación Publicitaria, Barros Horcasitas explicó que Profeco y Cofepris han demostrado que la autorregulación funciona, pues han creado reformas al Reglamento de la Ley General de Salud en materia de publicidad tras adoptar algunos de los conceptos y normas autorregulatorias del Código PABI.

¿Pero qué es la autorregulación? Guy Parker, presidente de la European Advertising Standars Alliance (EASA), ente responsable de dictar la pauta internacional en la materia, nos explica los 10 mandamientos sobre los cuales se debe trabajar para lograr una publicidad viable y ética.

1. Autorregulación en todas las formas de publicidad 

Tanto el monitoreo como la observación y hasta la invitación a que cada vez haya más actores autorregulados, Parker explicó que todo se hace de una forma exhaustiva, de tal manera que la cobertura sea total.

2. Buenos recursos

Una financiación adecuada y sostenida por la industria de la publicidad que solvente los gastos publicitarios de cada país hará que la propia industria sea libre y responsable al mismo tiempo, y a la larga, la autorregulación sea una forma de vida para los anunciantes.

3. Códigos efectivos

Establecer estándares para su operación ha sido fundamental para que hoy existan distintos organismos de autorregulación en todo el mundo. Y esto ha desembocado en la creación de códigos integrales y eficaces de las prácticas publicitarias basadas en los códigos de aceptación mundial de la comercialización y la práctica publicitaria de la Cámara de Comercio Internacional y que aplica a todas las formas de publicidad.

4. Consultas con todos los actores

La autorregulación se trata de un trabajo colectivo, y esto se logra con amplias consultas a todos los actores participantes e interesados en hacer publicidad de forma responsable, de tal manera que los códigos de funcionamiento se hagan cada vez más grandes y tengan mayor presencia.

5. Considerar la participación de todos

Y aunado al punto anterior, los movimientos de autorregulación son incluyentes y no excluyentes, es por eso que la debida consideración de la participación de prácticamente cualquier persona u organización es completamente aceptable

6. Buena administración

Ser un organismo bien administrado quiere decir que no sólo en el renglón económico sino en la forma de trabajar, pues para esto se requiere actuar de forma independiente e imparcial, pues el espíritu de su creación obedece a la transparencia y a un comportamiento ético.

7. Sin costo para el consumidor

Esta iniciativa surgió para ofrecer al consumidor una publicidad responsable, y es por eso que su gestión y las denuncias de los particulares son rápidas, eficientes y completamente gratuitas.

8. Asesoría y capacitación de profesionales

Con el fin de hacer más ancha la comunidad preocupada y ocupada por la publicidad responsable, estos organismos ofrecen asesoría y capacitación para que los niveles de la industria sean más eficientes y se construyan mejores organismo autorregulatorios.

9. Aplicación efectiva de sanciones

Se trabaja de la mano con las autoridades gubernamentales competentes, y las sanciones que se acrediten a los miembros de los organismo se cumplen a cabalidad, pues al tratarse de autorregulación, se supondría que todos acatan los acuerdos; sin embargo, cuando llegue a suceder, las sanciones se cumplen sin distingos.

10. Conciencia efectiva

En el afán de concientizar y reeducar a las personas, a las marcas, a los anunciantes y a las agencias, los organismos autorregulatorios no cesan en fomentar la publicidad responsable como un método efectivo para construir una industria más digna y más ética.

Es así como el titular del Conar en México resumió el papel de la publicidad: “la publicidad vende. No mata, ni enferma, ni desvía información (…) no maltrata la vida familiar”.

¿Cuáles consideras los principales retos de la publicidad responsable? ¿Crees que es viable la autorregulación publicitaria?

Fuente: www.altonivel.com.mx / POR: Oliverio Pérez Villegas