¿Es momento de renunciar a tu empleo?

Pero para otros, trabajar para alguien más nunca es una opción, por lo que tarde o temprano lanzan sus propios negocios.

Nhuri es una de esas personas que ha elegido entre ser intrapreneur o emprendedor. Y quizás tú estés pasando por la misma situación: tienes un negocio en el cual confías, por lo que tarde o temprano tendrás que decidir si trabajar en él a tiempo completo. Si no lo haces, probablemente pasarás el resto de tu vida preguntándote cómo hubiera sido.

Es cierto que los emprendedores tienen que dar un salto de fe en algún punto. Aunque pueda parecer muy amenazador, la clave está en que te asegures que tienes paracaídas.

El primer paso para prepararte para el día en el que renunciarás a tu empleo, es planear el lanzamiento o la expansión de tu negocio, pensando en todo lo que implica desde la ubicación de tus oficinas hasta cómo quieres que luzca tu producto en las vitrinas. Necesitas pensar también en los problemas o fallas de tu plan, para poder adelantarte a ellos. Si te tardas demasiado en dar este salto, muchas cosas pueden cambiar, como los mercados, la competencia y las oportunidades.

Para asegurarte de que tu plan funcione y que hayas considerado todos los detalles, necesitas conectarte con mentores. Tener un consejo sólido para tus ideas es algo invaluable, y te ayudará a hacer mejor la transición entre empresario de medio tiempo a uno de tiempo completo.

La situación de Nhuri (que no sabe si renunciar a su exitoso empleo para dedicarse de lleno a su negocio) me recuerda al día en que Brett Godfrer, un miembro del equipo financiero de Virgin Express, se me acercó con la idea de lanzar una aerolínea Virgin en Australia. Brett delineó su plan, le compartí mis pensamientos, y juntos establecimos los detalles. Pronto estábamos en camino de crear nuestro siguiente negocio Virgin, con Breet a la cabeza como CEO de Virgin Blue, siendo Virgin uno de sus principales inversionistas y yo fungiendo como cofundador y mentor.

Aunque Blue sólo tenía un par de aviones cuando comenzó a operar en 2000, Brett creció la aerolínea (ahora conocida como Virgin Australia) en un negocio exitoso. Brett y yo somos amigos y su carrera emprendedora ha ido haciéndose más sólida.

Tus mentores también serán las personas a las que buscarás por consejos y asistencia cuando las cosas no salen como las planeas. Y puedes tener la certeza de que las cosas nunca salen como las planeas, aunque eso es parte de la diversión. La toma de decisiones es más difícil cuando la llamada equivocada puede significar la diferencia entre que seas capaz de tus cuentas y a tus empleados o no. Con una sólida red de personas de soporte que tienen experiencia y conocimientos, es más probable que tomes mejores decisiones. 

Antes de que tu negocio se convierta en tu única fuente de ingresos, necesitas asegurarte de que te hayas protegido ante posibles caídas. Podrías necesitar asegurar ayuda financiera de inversores, o tal vez tu negocio requiera que te asocies con personas que te faciliten el arranque. Cualquiera que sea el negocio que esperas lanzar, debes pensar en las consecuencias de si tarda demasiado tiempo en despegar o si fracasa, y minimizar cuanto puedas esa posibilidad. Si eres capaz de poner un plan de contingencia, entonces podrás proceder con confianza.

Mientras que planeas, haces networking y buscas financiamiento, recuerda que la ventana de la oportunidad se está cerrando, y que en algún punto simplemente tendrás que ir tras ello. Entonces, todo lo que te queda por hacer es renunciar a tu trabajo y convertirte en tu propio jefe.

Sé valiente: Después de toda esa planeación, es tiempo de confiar en tu idea y creer en ti y en tu equipo. ¡Buena suerte!

Fuente: www.soyentrepreneur.com   / Por Richard Branson