Qué hacer con la música en la oficina

Un estudio publicado por el Centro de Investigación de la Adicción de Stanford (California) realizado por el científico Abraham Goldstein asegura que la mitad de las personas estudiadas experimentaban euforia mientras escuchaban música. El informe concluye con la teoría de que las “emociones musicales”, es decir, la euforia que produce escuchar cierta música, son consecuencia de la liberación de endorfinas, como respuesta a la actividad eléctrica que se propaga en una región del cerebro.

Música y trabajo
En el entorno laboral se da igualmente el dilema del uso de la música y su repercusión sobre el rendimiento. Trabajar con música como fondo sonoro tiene numerosas ventajas:

1. La música es muy estimulante, hace aumentar ligeramente el ritmo cardíaco y la tensión arterial liberando adrenalina. Es ideal para dar un acelerón al ritmo de trabajo o para combatir el aburrimiento.

2. La música mejora el humor, haciendo más amenas las tareas que se llevan a cabo.

3. La música apropiada puede mejorar la concentración y la atención. Además, aumenta la memoria.

4. Reduce la sensación de estrés.

5. La música aumenta la creatividad porque ésta y el sentido musical se sitúan en las mismas zonas cerebrales.

6. Ayuda a atenuar tapar ruidos indeseables (tráfico, conversaciones…).

Consecuencias negativas
1. La cantidad de estímulos que puede procesar simultáneamente el cerebro humano es limitada antes de que aparezca una sensación de estrés y ansiedad. La música puede disminuir la atención en el trabajo y la concentración, por lo que las tareas que exigen una concentración fuerte se realizan mejor sin música.

2. La música puede crear tensión e irritación si es contraria al gusto del trabajador.

Consejos Randstad
Para quienes quieren escuchar música en el trabajo, Randstad tiene algunas recomendaciones:

1.- Utiliza la música para recargar tus baterías, mediante ‘toques’ o canciones sueltas, para relajarte o pasar de una tarea a otra, para estimular tu creatividad o para cubrir los atenuar ruidos desagradables.

2.- Escoge la música apropiada para cada momento anímico: no se siente igual cuando estás estresado y necesitas relajarte que cuando estás cansado y quieres “ponerte las pilas”.

3.- Si compartes el escritorio con varios colegas, es probable que te encuentres con que tienen gustos musicales diferentes. Opta entonces por una música "neutra" (pop ligera o clásica dulce), o utiliza unos auriculares. Lo mejor es usar sólo uno o mantener el volumen bajo para no perder el contacto con los demás.

4.-No te sobrecargues. La mejor regla es: cuanto más compleja sea la tarea, más ligera debe ser la música. A veces, es preferible cortarla.
Un programa de radio (música o comentarios) es ideal para hacer agradable un trabajo rutinario.
 

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